
Preguntas clave sobre nuestras puertas de interior
¿Qué es mejor, una puerta de madera maciza o una rechapada?
Elegir entre una puerta maciza y una rechapada depende del equilibrio que busques entre calidad y presupuesto. Las puertas de madera maciza destacan por su resistencia, su capacidad de aislamiento y su presencia imponente. Están fabricadas con madera natural en todo su grosor, lo que se traduce en una vida útil más larga y una mayor estabilidad frente al paso del tiempo. Por su parte, las puertas rechapadas cuentan con un núcleo de MDF o aglomerado recubierto por una lámina de madera, imitando el acabado de una puerta maciza, pero con menor peso y coste.
Si el objetivo es lograr una estética cuidada con un presupuesto más ajustado, la rechapada cumple. Pero si buscas autenticidad, durabilidad y calidez real, la maciza es la mejor apuesta.
¿Es mejor comprar la puerta ya barnizada o en crudo?
Comprar una puerta ya barnizada facilita mucho el proceso, ya que llega lista para instalar, con un acabado uniforme, resistente y profesional. Es ideal para quienes valoran la inmediatez y quieren evitar complicaciones durante la obra o reforma. En cambio, una puerta en crudo es la elección preferida por quienes desean personalizar el tono, aplicar un tratamiento específico o igualar el color con otros elementos del mobiliario o carpintería interior. Eso sí, esta opción requiere tiempo y dedicación, ya que implica aplicar barnices o lacas por cuenta propia o a través de un profesional. Todo depende de si buscas comodidad o libertad creativa.
¿Qué medidas estándar existen para las puertas de interior?
Las puertas de interior suelen fabricarse en medidas pensadas para adaptarse a los huecos más comunes de viviendas modernas, aunque siempre existe la opción de fabricar a medida si el caso lo requiere. La altura más habitual es de 203 cm, y en cuanto al ancho, se manejan diferentes opciones según el tipo de estancia. Baños, dormitorios, salones o pasillos pueden requerir anchos distintos, por lo que conviene revisar bien el espacio disponible antes de decidir. Además, también influye el grosor de la hoja y del marco, que puede condicionar la instalación si el premarco no está preparado.
¿Puedo instalar una puerta de madera en baños o zonas húmedas?
Sí, instalar una puerta de madera en zonas húmedas es perfectamente posible siempre que esté bien tratada para resistir el ambiente. En baños, cocinas o lavaderos, lo importante es que la puerta cuente con un acabado adecuado, como barnices resistentes al vapor, lacas sellantes o tratamientos antihumedad que eviten el hinchamiento o la deformación. Elegir un modelo con protección específica y mantener una ventilación adecuada en la estancia garantizará su durabilidad sin problemas. La madera, bien cuidada y correctamente protegida, puede rendir perfectamente incluso en espacios con alta exposición a la humedad.
¿Qué incluye una puerta de interior al comprarla?
Al comprar una puerta de interior, es fundamental tener claro si se está adquiriendo solo la hoja o un conjunto completo. En muchos casos, la puerta viene suelta, sin herrajes, sin marco ni manilla, pensada para quienes ya cuentan con una estructura instalada o desean personalizar los acabados por separado. Otras veces, se vende en bloque, es decir, con el cerco montado, las bisagras incorporadas y todo lo necesario para colocarla directamente en obra. Eso sí, incluso en los packs más completos, la manilla suele ir por separado, ya que se elige al gusto del cliente. Aclarar qué incluye exactamente el producto antes de comprar evita sorpresas y permite ajustar el presupuesto real de la instalación.